Cuando se da el paso de reformar una vivienda, es necesario pensar no solo en renovar su aspecto, sino en mejorar el confort. En este sentido, es necesario tener en cuenta algunas medidas en relación, por ejemplo, con la eficiencia energética. Una casa con una buena eficiencia energética está mejor aislada, conserva mejor el calor en invierno y el frío en verano, nos hace ahorrar más en consumo de energía, agua, gas, etc. ¿Qué aspectos son los que pueden afectar positivamente al confort del hogar?
Aislamiento térmico
El confort térmico es uno de los aspectos más importantes en una vivienda. Para lograrlo, es fundamental que el inmueble tenga un adecuado aislamiento. Es muy común, sobre todo en viviendas antiguas, tener que revisar ventanas, fachadas, techos, suelos o paredes, entre otros elementos, para comprobar si aíslan correctamente del frío o si es necesario rehabilitar o reformar.
Aislamiento acústico
Siguiendo un poco la línea del punto anterior, también es clave contar con un buen aislamiento acústico. Los ruidos pueden ser realmente molestos, tanto si llegan desde el exterior, como si atraviesan las paredes interiores. Por eso, hacer algunos cambios en elementos como los mencionados anteriormente teniendo esto en cuenta puede ser un gran acierto.
Evitar problemas de humedad
En algunos casos, en especial en viviendas antiguas, es habitual que existan algunos problemas de filtraciones o de humedad. Es muy común la humedad por capilaridad ascendente en las paredes, por ejemplo. Este problema afecta en gran medida al confort de la casa. Con algunas reformas es algo que se puede solucionar.
En Loga Rehabilitaciones tenemos en cuenta todos estos problemas de cara a la realización de una reforma con el fin de mejorar la calidad del confort en las viviendas en las que trabajamos.